Ciudad de México: Sin pausa

La capital mexicana atrapa con su incesante bullicio y su riqueza cultural. A los atractivos más clásicos del destino se le suman nuevas propuestas hoteleras y venues que permiten sumergirse en las entrañas de una historia que recuerda los fuertes lazos entre América y Europa.
1 de octubre de 2023

Por Eva López Álvarez

La capital mexicana es un destino de altura, incluso desde el punto de vista geográfico. Situada a 2.250 metros sobre el nivel del mar, a veces sorprende al foráneo con el cansancio que esto puede producir a la llegada. Una vez superado este posible imprevisto, la magia de una urbe que fascina se mezcla con las realidades intrínsecas a una de las mayores ciudades del mundo.

Por ejemplo, los receptivos locales han aprendido a convivir con el tráfico. No obstante, a la evidencia de que en hora punta es imposible calcular con precisión los tiempos de desplazamiento, se suman nuevas exigencias de sostenibilidad que contribuyen a la elección de sedes estratégicamente situadas dentro de los diferentes distritos. La tematización de los programas de incentivo en torno a las llamadas colonias es cada vez más frecuente.

Desde marzo de 2022, el tráfico en el cielo se encuentra menos saturado gracias a la puesta en marcha del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA). Situado a 44 kilómetros al norte del centro histórico, el tiempo hasta el centro con respecto al aeropuerto tradicional se puede triplicar. Existe el proyecto de operar taxis aéreos que conecten este nuevo aeródromo con el distrito de Polanco, aunque aún no ha sido ejecutado.

Casco Histórico

Para incentivos, el casco histórico reúne muchos atractivos que no solo se resumen en el inconfundible encanto de uno de los emblemas culturales de Latinoamérica. La calidad de
la hotelería también suma. City Centro by Marriott Ciudad De México ocupa lo que fue un antiguo banco. Cuenta con 44 habitaciones y una azotea.

Círculo Mexicano, miembro de Design Hotels, fue inaugurado hace dos años como fruto de la reconversión de una casa palaciega del siglo XIX. Se ofrece como una inmersión en la
cultura local reinterpretada con el diseño más contemporáneo, haciendo homenaje al fotógrafo que habitó previamente el lugar. Las 25 habitaciones de este sofisticado establecimiento ocupan los pisos 2 y 3 del edificio. Todas cuentan con balcón o patio privado.

Precisamente por su casco histórico, a Ciudad de México también se la conoce como la Ciudad de los Palacios. Y es que este distrito de la capital mexicana no solo alberga joyas
únicas en el mundo como los vestigios del Templo Mayor, Plaza del Zócalo corazón de la vida religiosa mexica (aztecas de México-Tenochtitlan), o la catedral más antigua de América, conocida como el Zócalo.

También un gran número de residencias y sedes que testimonian de la importancia que la ciudad ha tenido en los últimos siglos entre las esferas políticas, intelectuales y culturales. Son además la prueba tangible de las relaciones entre una Europa que siempre se ha asimilado a la elegancia y el refinamiento y una tradición local que se percibe mucho más allá de los característicos materiales de construcción de los diferentes edificios.

Junto a la catedral, el Palacio Metropolitano es un edificio neoclásico que albergó la primera institución financiera del continente americano. Sus salones se alquilan para eventos desde 2017.

En total, los espacios que se ofrecen incluyen dos patios que se pueden cubrir, además de cinco salones de diferente decoración. La que fue a lo largo de su historia residencia de la esposa de Porfirio Díaz, alberga cenas de gala de hasta 400 comensales, pudiendo alcanzar los 800 invitados en cóctel. Sin dejar atrás los inmuebles vinculados a las finanzas, Casa
Abierta Monte / Nacional Monte de Piedad es una institución donde todavía hoy los mexicanos acuden para conseguir dinero a cambio de sus bienes. También junto a la catedral, esconde en sus cimientos los restos del antiguo Palacio de Axayácatl, padre de Moctezuma. También fue utilizado como residencia por Hernán Cortés.

Desde hace tres años, el patio con el vitral de luces cambiantes obra Vicente Rojo, se ofrece para cenas de gala de hasta 300 asistentes. Además, son numerosos y muy diversos los distintos espacios que se ofrecen en un interior que no ha terminado de dotarse como venue, ya que aún se encuentra en proceso de recuperación.

Clásicos del casco histórico

También formando parte del casco histórico, el Palacio Postal (también conocido como la Quinta Casa de Correos) cuenta con un vestíbulo que ya genera el efecto wow! entre los
invitados con tan solo atravesar la puerta de entrada. El vestíbulo puede recibir hasta 300 invitados en cóctel. Son varios los salones para eventos, siendo especialmente demandado
el Gran Salón, con capacidad para 200 personas, dotado con una colección de relojes antiguos.

El majestuoso Palacio de Bellas Artes reina entre todas las propuestas y es posible utilizarlo como venue, si bien las dificultades a la hora de conseguir permisos hace que muchos DMCs se decanten por otras opciones.

Frente al Palacio de Bellas Artes se encuentra el Hilton Mexico City Reforma. Con 456 habitaciones en 27 pisos, es el hotel con mayores capacidades para convenciones y congresos dentro del centro. Hasta 5.000 personas pueden participar en un evento en caso de ser utilizados todos los espacios. El mayor puede albergar a 1.500 comensales en banquete.

Al otro lado del Parque de la Alameda, el Ex Convento de San Hipólito es en sí mismo un libro de historia: escuela de guerreros, templo católico, hospital psiquiátrico… hasta ser
uno de los lugares más populares del la ciudad para eventos sociales y cenas de clausura de congresos y eventos. Puede recibir hasta 700 comensales. Las inclinaciones del claustro
son fruto de los numerosos seísmos que ha vivido esta zona de la ciudad.

Paseo de la Reforma

Buena parte de las novedades hoteleras de Ciudad de México se concentran la que los locales denominan los «Campos Elíseos de América». Se dice que es la calle más cara de
Latinoamérica y cuenta con una curiosa historia que explica la conexión en línea recta que se establece entre el casco histórico, donde se encuentra el Palacio Nacional –principal
edificio del gobierno de México– y el que fue el castillo del rey Maximiliano, en el parque de Chapultepec.

Cuentan algunas lenguas que la emperatriz ordenó construir esta avenida para controlar que su marido no se desviase en el camino a casa tras sus obligaciones profesionales. Otras afirman que era ella quien necesitaba saber cuándo regresaba su marido por haberse dedicado a otros menesteres que iban más allá de la espera… sea como sea, el antiguo Paseo de la Emperatriz, rebautizado como Paseo de la Reforma por Benito Juárez, es hoy en día sede de los hoteles más exclusivos de la ciudad.

Marquis Reforma Hotel & Spa Ciudad de México es un clásico que está siendo renovado. Abrió sus puertas hace 32 años y se encuentra inmerso en una remodelación completa cuyo final está previsto para 2024. Cuenta con 219 habitaciones y tres restaurantes. En el mayor de los cuatro espacios que se ofrecen para grupos profesionales, puede albergar a 800 delegados en teatro.

Más enfocado en el segmento de los incentivos, la propiedad cuenta con otro hotel de estética contemporánea en la vecina Avenida Insurgentes: Elements by Marquis cuenta con 44 habitaciones y terraza. En colaboración con el Museo Estelar, se ofrece acceso a este templo para los fans de Star Wars.

Sofitel Mexico City Reforma, inaugurado a finales de 2019, se presenta ante el huésped como una casona francesa de los años 30 del siglo pasado. Esta parte más antigua sigue
albergando un speak easy bar y forma parte de los espacios que se ofrecen para eventos.

El rascacielos que respalda el edificio original cuenta con 275 habitaciones, incluyendo 56 suites, entre los pisos 12 y 40 que ocupa el hotel. El salón del piso 40 forma parte de los
espacios de moda para grupos MICE. Tiene capacidad para 320 personas en cóctel y ofrece y espectaculares vistas.

Allí donde convergen el Paseo de la Reforma y el Parque de Chapultepec, abrió sus puertas en 2021 The Ritz-Carlton Mexico. Cada una de las 153 habitaciones cuentan con bañera y vistas a la ciudad, gracias a que el hotel se sitúa a partir del piso 39 de las nuevas torres que también albergan parte de los apartamentos más exclusivos de Ciudad de México.

Las áreas para eventos del hotel se encuentran en el piso 11, donde un salón divisible en cuatro puede recibir hasta 300 participantes en una sesión en formato teatro. Se suman cuatro salas de juntas con capacidad para diez personas.

Condesa

Este distrito se disputa con la Colonia Roma ser el más cool de la ciudad. Siguiendo el estilo bohemio chic del entorno, el hotel Mondrian Mexico City Condesa fue inaugurado a finales de 2022 en un edificio protegido.

La marca lifestyle del grupo Accor se estrenó en el destino con este establecimiento de 183 habitaciones, entre las que se incluyen 34 suites. Forma parte de un complejo en el que también se integra el hotel Andaz Mexico City Condesa del grupo Hyatt, que cuenta con salones para sesiones profesionales. En total, ambos hoteles suman 396 habitaciones,
convirtiéndose de este modo en la opción de alojamiento más amplia en La Condesa. En la azotea del piso 9 hasta 450 invitados pueden disfrutar de un cóctel.

El hotel San Fernando nació de la reforma de un edificio de apartamentos, lo que justifica la diversidad de tamaños que se ofrecen entre las 19 habitaciones. Está situado junto al
Parque México, un pequeño oasis urbano en el que ya se han organizado actividades de team building.

Casa León es uno de los venues de Colonia Condesa: construido en 1932, cuenta con jardín, galería y un claustro cuadrado con columnas en estilo mudéjar en lo que es un homenaje al sincretismo cultural que tan fácilmente se encuentra en Ciudad de México. En la vecina Colonia Roma, Casa Roma by Loft 450 es otro espacio singular de moda, fruto de la renovación de una casa de 1920.

Zona Rosa y Colonia Roma despiertan cuando cae al sol. La colonia –o distrito– Roma compite con Coyoacán por ser el barrio bohemio de Ciudad de México. Y desde mucho antes de que el director de cine Alfonso Cuarón lo inmortalizara en su película Roma. Bien merece una visita durante la que apreciar el eclecticismo de sus edificios.

Polanco

Las mansiones de inspiración europea se cuentan por cientos en Ciudad de México, y muchas de ellas renuevan su historia como espacios destinados a grupos MICE. Una de las
últimas en ser acondicionada, en este caso como hotel boutique en el barrio de Polanco, es Orchid House Polanco. Como su nombre indica, el establecimiento rinde tributo a las orquídeas y así se percibe desde la entrada. Las 17 habitaciones han sido decoradas con un refinado gusto por el detalle. La propiedad cuenta con otros hoteles de diseño en el país, más concretamente en San Miguel de Allende, Tulum y La Paz.

JW Marriott Mexico City Polanco es un clásico en el destino. Recientemente presentó la renovación de sus ocho salones, pudiendo recibir hasta 290 delegados en teatro en el mayor. Los salones Chapultepec y Campos Elíseos cuentan con terraza con vistas. A ellos se suman siete salas para reuniones informales. Las 314 habitaciones también ha sido renovadas.

Para 2025 se espera una de las aperturas más deseadas. Los especialistas en eventos para marcas de lujo esperan la llegada de una nueva referencia del mayor standing en la capital mexicana: el hotel Rosewood Mexico City.

Contará con 133 habitaciones, entre las cuales se incluirán 35 suites. Formará parte del recinto el centro de bienestar Asaya y 1.270 m² destinados a salones.

Se situará cerca de dos de los grandes venues de Polanco: los museos Soumaya, cuyo vestíbulo se ofrece para cócteles de hasta 400 asistentes, y Jumex, dedicado al arte contemporáneo. Sus espacios completamente depurados y de inspiración industrial se ofrecen para eventos.

Naucalpán

El Centro Citibanamex sigue siendo la mayor infraestructura para congresos, convenciones y eventos en Ciudad de México, dentro de este distrito que alberga numerosas sedes de empresas locales y multinacionales con presencia en México.

Se encuentra junto al hipódromo, al que se asoma el gran vestíbulo acristalado que ejerce de entrada a los pabellones de exhibición. Sus cifras demuestran su tamaño: 34.000 m² de espacio para sesiones profesionales y 25 salones con capacidad para 10.000 delegados en el mayor.

Novotel Mexico City Toreo es uno de los últimos hoteles llegados a la planta de Naucalpán, inaugurado en 2021. Con el estrenó su marca urbana el grupo Accor en la capital mexicana y mantiene el recuerdo de la antigua fábrica que hoy es el complejo de negocios Forum 2021, compuesto por cuatro edificios. El hotel ocupa los cuatro últimos pisos (del 9 al 12) de uno de ellos. Cuenta con 168 habitaciones y dos salones panelables para sesiones de hasta 400 delegados en teatro. Se añaden varias salas de juntas para reuniones de hasta 24 personas, además de una terraza exterior para cócteles de un máximo de 60 invitados adjunta al restaurante.

Coyoacán

Mientras que Condesa y Zona Rosa atraen a quienes buscan descubrir el México más vibrante, Coyoacán ofrece una atmósfera en la que el eclecticismo y la melancolía se mezclan en un ambiente bohemio.

Entre los muchos venues singulares destaca el emblemático Museo Frida Kahlo (Casa Azul) donde residió la artista. ES posible organizar eventos en sus jardines y cualquier búsqueda del tesoro en los alrededores la tendrá como protagonista. Porque aquí todo parece recordar a Frida… y a su pareja, Diego Rivera, creador del Museo Diego Rivera Anahuacalli. En la explanada exterior, que reproduce un terreno azteca destinado al juego de pelota, se pueden organizar actividades de team building inspirados en las tradiciones aztecas o banquetes de hasta 300 invitados.

Más al sur de la ciudad se encuentra Xochimilco, otra de las joyas de Ciudad de México para incentivos. También permite remontarse a la época en la que la ciudad era una serie
de extensiones de agua en la que moraban las civilizaciones prehispánicas.

Los canales se ofrecen hoy para el paseo a bordo de coloridas barcas –cada una con su nombre–, con la música de los mariachis de fondo. Desde algunas barcas se ofrece comida
y artesanías a los viajeros.

Teotihuacan

En el lado opuesto –al noreste– de la ciudad, a una hora por carretera del aeropuerto AICM, se encuentra la Ciudad Prehispánica de Teotihuacan, otro de los lugares ineludibles en un programa de incentivo.

Es el complejo arqueológico más visitado de México y la manera más exclusiva de admirarlo es sobrevolando el espacio en helicóptero. El globo es otra opción.

La identidad de los pobladores sigue siendo una incógnita, pero nadie duda de la gran importancia que tuvo en su momento dada la riqueza de las pinturas murales y los espacios
habitacionales que aún se conservan, en una ciudad que llegó a superar los 100.000 habitantes.

De camino se puede visitar la Basílica de Guadalupe. Es el templo católico más visitado del mundo y el lugar ideal para observar el fervor que sienten los mexicanos por su virgen.

Inmersión

Los mercados de la ciudad se prestan a divertidas sesiones de team building, ya que los locales suelen mostrarse predispuestos a colaborar en las misiones. El mercado de San
Juan, donde se puede encontrar hasta carne de león, armadillo, iguana o avestruz, no solo destaca por la gran variedad de producto sino por ser la sede ideal de un rally fotográfico.

Los participantes pueden asumir el reto de conseguir los ingredientes de una clase de cocina posterior. Hay elementos tan curiosos dentro de la cocina mexicana que otro desafío
puede consistir en adivinar qué se está degustando.

Otra propuesta de inmersión que no dejará indiferente a nadie es la lucha mexicana, algo tan genuino de Ciudad de México que nunca faltará por parte de un mexicano la invitación
a vivir una sesión. Los aficionados no solo jalean a sus luchadores favoritos: aprovechan la ocasión para gritar divertidas ocurrencias que no sólo provocan la risa de quienes se encuentran cerca, sino respuestas igual de originales.

Las opciones para incentivos son tan numerosas como culturas se mezclan en esta parte de América. México significaría para los mexicas «ombligo de la luna» u «ombligo del universo». Sin estar realmente confirmado, no hay duda de que el viajero tiene la sensación de que cualquier influencia del mundo se puede encontrar en una urbe que parece absorber al visitante. Sin embargo, Ciudad de México también deja un gusto a liberación cuando se deja. Aunque también, pronto vuelven las ganas de regresar.

 

Más información:

FONDO MIXTO DE PROMOCIÓN TURÍSTICA DE CIUDAD DE MÉXICO
Virginia Arana
Dirección de Congresos y Convenciones
varanap@fmpt.cdmx.gob.mx
+52 1 55 7599 3082 ext. 1002
www.fmpt.cdmx.gob.mx 

 

Accede al contenido completo en la edición 54 de la revista PUNTO MICE: www.puntomice.com/punto-mice-54.

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