EL BREXIT IMPACTARÁ EN LA INDUSTRIA MICE

Reino Unido podría ser un destino más asequible para la celebración de eventos, pero la salida de la UE podría conllevar largas colas en los aeropuertos o menos protección de los pasajeros.
29 de marzo de 2017

Con la carta de la premier británica Theresa May al Consejo Europeo invocando el artículo 50 del Tratado de Lisboa, el 29 de marzo es oficialmente el día en que comienza el proceso de negociación de la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE). El impacto del brexit en la industria MICE será más claro en los próximos 18 meses, plazo en el que se espera alcanzar un acuerdo, dando fin al período actual de incertidumbre.

Un efecto inevitable que ya se dejó notar tras el referéndum del pasado mes de junio es la fluctuación de la libra esterlina. Muchas empresas británicas han pospuesto sus planes en cuanto a reuniones o eventos este año por este motivo. En general, el business travel se ha encarecido para los corporativos nacionales. Algunas aerolíneas como Virgin Atlantic esperan pérdidas considerables de beneficios por la devaluación de la libra y el menor tráfico.

Por otro lado, la devaluación de la libra convierte al Reino Unido en un destino más asequible para la celebración de eventos. Pero la salida de la UE puede al mismo tiempo hacer los viajes menos atractivos, con largas colas en los aeropuertos o privando a los pasajeros de la protección de directivas europeas en caso de retrasos, por ejemplo.

Las aerolíneas británicas necesitarán mover su base a otros países de la Unión Europea o vender acciones a ciudadanos europeos si quieren continuar operando rutas dentro de la Europa continental. Igualmente, las compañías aéreas europeas deberán renegociar sus acuerdos para volar al Reino Unido. Estas complicaciones pueden derivar en tarifas más altas para los pasajeros.

Se espera que uno de los primeros puntos a debatir afecte a los derechos de los ciudadanos de la UE para residir y trabajar en Reino Unido, y de los británicos para hacerlo en el continente. Es un aspecto que afectará a muchas empresas en sectores globales como el turismo y los congresos, que a menudo cuentan con plantillas internacionales.

Comparte este artículo: