En estos momentos en los que el coronavirus se ha convertido en el único tema que nos atañe, y cuyas consecuencias para el futuro puede que sean bastante difíciles e impredecibles, creo necesaria una reflexión sobre el papel de los DMC (Destination Management Company) en la industria MICE.
El DMC o agencia receptiva es ante todo un asesor del organizador de un evento corporativo, a quien le aporta el conocimiento del destino y de sus posibilidades para organizar el programa que su cliente necesita, así como la logística para llevarlo a cabo. Como experto del destino, el DMC no solo es el contacto perfecto para la agencia o empresa de otro país a la hora de tejer el mejor programa, sino también un reconocido cliente de sus proveedores locales, la mayoría con larga trayectoria.
Normalmente, el DMC no es el propietario de los servicios que ofrece a sus clientes. El hotel no es suyo, como tampoco lo son los venues, restaurantes, caterings, autocares, etc. Por ello me atrevería a decir que el DMC promueve un destino, en nuestro caso España, en su totalidad. Cuando un proveedor intenta atraer a un cliente extranjero intentará convencerle de que utilice su hotel, su espacio, su restaurante… Sin embargo, cuando un DMC le hace una propuesta a ese mismo cliente lo primero que hace es presentarle las ventajas del destino. Después le ofrecerá los servicios del hotel, venue, restaurante… quesabe se adecúan mejor a sus necesidades.
El DMC promueve un destino, en nuestro caso España, en su totalidad
De las múltiples llamadas que los DMC reciben de todo tipo de proveedores en la situación actual, muchos se interrogan sobre el mercado y, sobre todo, sobre los tiempos estimados de recuperación. Esto evidencia que los proveedores locales tienen a los DMC como un referente sobre el pulso de la actividad. Si el DMC está trabajando propuestas cuenta con muy valiosa información sobre los mercados de las que proceden, para cuándo son… Es decir, para los diferentes proveedores de la industria MICE el receptivo es un indicador claro de “lo que se avecina”.
También es trabajo de los DMC ejercer de canal de comunicación entre el cliente final (empresa), la agencia emisora y el proveedor. Por eso los proveedores han de confiar en los DMC y con esta misma confianza crear equipos multidisciplinares que sean capaces de alcanzar la excelencia.
Ante el COVID19 el MICE es una de las industrias más golpeadas. El trabajo del DMC comienza al menos seis meses antes de la realización del viaje o evento. Dependiendo del mercado en el que se origine el proyecto, a veces trabajan con dos años de anticipación. Por eso ahora estamos viendo desaparecer proyectos que se habían empezado a construir en 2018.
Es trabajo de los DMC ejercer de canal de comunicación entre el cliente final (empresa), la agencia emisora y el proveedor
Ahora mismo es mucha la incertidumbre sobre como será “el día después”, incluso más teniendo en cuenta que muchos de nuestros mercados internacionales estarán luchando aún contra el virus cuando en España salgamos del confinamiento.
Por eso este 2020 será extremadamente duro para nuestro sector en general, y para los DMCs en particular, que ahora mismo tienen cancelada prácticamente la totalidad del negocio hasta finales de agosto. La falta de peticiones para los meses siguientes augura que la recuperación del mercado será mas tardía de lo que quisiéramos todos y más lenta que la de otras industrias que, en cuanto vuelvan a abrir sus puertas, volverán a facturar.
Diferentes estudios apuntan a que el MICE tardará – como mínimo – unos 18 meses en recuperarse. Los DMCs creemos que nosotros tardaremos más, por lo que contamos con 24 meses por delante muy duros.
Y aún así, los receptivos, como siempre han hecho, se adaptarán y resistirán.